Antropología de la corporeidad: el animal que calza (23).
La higiene y la erótica.
La estilización
corporal que produce la serpentina curvatura del cambrillón del taco aguja, huye
de la evaluación ortopédica, elude la medicalización y las prescripciones
higiénicas. La elevación del talón induce hambre celestial al empeine y a los
dedos, que se sumen en un vaivén rítmico entre la tierra y el paraíso. Ninguna promesa de dolor puede
contrarrestar el inefable goce de estar suspendida de la realidad, inmersa, sin
embargo, en el más sensual y erótico estado de hallarse en el mundo-. Solo el
pavor metafísico puede estar detrás de esa higiene corporal. La (el) hedonista se solaza de hundirse en el
pecado de la lujuria del vuelo terreno.
Etiquetas: erotismo, hedonismo, higienismo