La Perinola

Como en un juego la vida da y quita. Pero la perinola es accionada por fuerzas absolutamente humanas. Pensar la realidad cotidiana es el objeto de estos apresurados apuntes críticos.

domingo, 2 de noviembre de 2008

La violencia visible y la violencia exculpada.


Los medios de comunicación presentan enfáticamente un insoportable clima de inseguridad. No hay margen para desatender esa violencia que troncha existencias, que mutila futuro. Pero son pocos los casos para que el espacio mediático se sature de esa protesta absoluta, omnipresente, amenazante. Solo miedo y bronca deriva de esa presentación exagerada, hiperbólica. Los voceros de ese miedo que se vuelve amenaza, amonestación, griterío son respetables y visibles ciudadanos. La verbalización de su reclamo se vuelve político porque los custodios de la gobernabilidad hacen suyas quejas que expresan el sentir que quienes configuran el soporte material e ideológico de su propia razón de ser. Pero la otra violencia, la capilarmente extendida por toda la sociedad bajo la forma universal de la desocupación, el subempleo, los magros salarios, la exclusión, la marginalidad aparece absolutamente soslayada. Y es tan enorme esa violencia que se perpetra contra la vida de niños condenados de antemano a la miseria y a la inexistencia social, contra los anhelos y deseo de millones de jóvenes que deben ver la vida de reojo, contra la decrépita vida de quienes han pasado ya gran parte de su vida en el olvido y en la barbarie, que parece increíble que exista tan poca violencia visible, tan poca violencia que vulnere vida y bienes de los vecinos honestos, tan escasa casuística para la hipervisibilización violenta que los medios de comunicación, ávida y quejosamente exhiben como esperando que su denuncia genere finalmente una caza legal de los insociales, de los peligrosos virus que gangrenan el cuerpo de la sociedad.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio

 

Poodwaddle.com